Un error común en la estrategia de redes sociales suele ser tratarlas como meros canales para difundir el contenido, desatendiendo el valor añadido que aportan estas nuevas plataformas tanto al usuario como al desarrollador de dicha estrategia. Entre estas nuevas oportunidades destaca el enorme potencial para analizar el impacto de una publicación y, por lo tanto, la efectividad de la misma. A continuación, desglosaremos brevemente algunas herramientas de análisis, propias de las redes sociales más comunes, para entender mejor su uso:
- Facebook insights (https://www.facebook.com/insights) nos permite descubrir hasta el último ‘click’ realizado dentro de nuestra publicación. Sería un error utilizarlo sólo para comprobar el alcance (una cifra que nos muestra a cuántas personas les ha aparecido en su muro) e ignorar la actividad de interacción que han realizado los usuarios. Una publicación crece cuanto más se comparte y comenta, por lo tanto, debe invitar a los usuarios a interaccionar con ella.
- Twitter analytics (https://analytics.twitter.com/about) es una herramienta que permitirá conocer la vida útil de cada ‘tweet’, así como las tendencias de nuestros seguidores. De esta manera, podremos saber cuándo y cómo debemos publicar el contenido y si debemos fomentar la conversación (una de las claves de esta red social).
Sin embargo, el gran potencial de una estrategia es la combinación de todas las herramientas de análisis para obtener un resultado global que nos permita estudiar posibilidades de complementar las distintas redes sociales para alcanzar los objetivos planteados. Podemos medir cada interacción que realizan nuestros seguidores en las redes sociales, comprobar cuántas personas se dirigen a nuestra web, a través de qué contenido, etc. Podemos conocer a nuestra audiencia prácticamente en tiempo real, algo con lo que sólo pueden soñar los medios televisivos. Desaprovechar ese potencial implica no entender el poder de las redes sociales.
No debemos olvidar que detrás de cada publicación hay una persona que fácilmente dejará de escucharnos si no le ofrecemos el tipo de contenido que busca, y en el caso que nos ocupa, podemos llegar a conocer cuál es ese contenido. Como ya hemos dicho en el título de este artículo, compartir no es suficiente. Las audiencias y los medios han cambiado drásticamente y hasta que no entendamos que pulsar el botón “publicar” no es el último paso, sino el primero, estaremos lanzando flechas a ciegas con la esperanza de acertar en alguna de las diminutas dianas que conforman el hiperespacio.
Pablo Asensio